31 octubre 2007

Vacaciones postales... o algo así

Estos días no curro en nuestra querida empresa, y es por eso que no escribo casi nada, podría poner cosas como la directiva postal europea y rollos así, pero para eso ya hay otras páginas del gremio mejor informadas que yo, así que como no tengo anécdotas nuevas que contar ni sucesos paranormales en el mundo postal, determino que este blog queda en standby hasta que algún contrato decente pueda revivirlo, hasta entonces os invito a que pinchéis en todos los banners, es gratis, no os voy a cobrar ni nada, y a que os bajéis el firefox, ¿y porqué? porque ahora no estoy currando y por supuesto necesito dinero jejeje

Ale, hasta el próximo post, y no dejéis olvidado este rincón, que no cierra, solo se suspende hasta que algún día suceda algo curioso en la vida de este pobre cartero :P

06 octubre 2007

Sacabo'

Los contratos de verano se van, vuelven los fijos (fijos) y los pocos funcionarios que quedan.

Los no tan fijos y los eventuales nos quedamos en esas "maravillosas" bolsas de trabajo, que es algo así como "el cajón de sastre" pero en vez de utensilios de costura lo que hay son personas.

Yo siempre he mantenido la idea de que el nombre "departamento de personal" es algo horrible y muy eufemista, es una forma hipócrita de llamar a un área de la empresa la cual está destinada a la obtención, mantenimiento y reemplazo de personas, lo cual, si fuésemos Stanley Kubrik o lo viésemos a través de sus ojos, veríamos una gigante maquina la cual se alimenta de cuerpos los cuales va desmembrando, acoplando y explotando a su gusto para obtener la mayor fuente de ingresos. Y tampoco creo que eso se aleje mucho de la realidad, aunque en la realidad solemos llamarle trabajo.

Y es que este verano he visto muchas cosas (no tantas como otros veranos, pero si muy aclaratorias), he visto contratados eventuales que tenían menos de un mes de vida en la empresa partirse la espalda (literalmente) para sacar a la calle docenas de masivas y de paquetes en una mañana, esperando simplemente que el mes siguiente les renovasen el contrato, y al mes siguiente no volver a pisar Correos, y he visto compañeras con problemas de salud de índole diversa, sobrepeso, y más de 45 años, patearse su barrio día a día y sacar el trabajo adelante aunque ese día estuviesen enfermas y doloridas, porque coger una baja laboral les/nos supone más de 200 euros de penalización en nómina, y si ya no llegaban a fin de mes con un sueldo de 950 imagínense con 750.

Yo por mi parte no tengo queja particular, sólo esta queja pública de gente que trabaja bien duro para sacar un trabajo en ocasiones desmesurado y que no obtienen ninguna gratificación complementaria (ni económica ni de otro tipo) y que cuando están explotados y bien exprimidos, simplemente son reemplazados por otra persona, otro cuerpo humano, o mecánico, que cumpla esa función, sin más ni más.

Como decía antes, este para mi no ha sido ni el peor verano de mi vida, ni el mejor tampoco, ha sido mi primer verano como fijo discontinuo y he trabajado lo mismo o menos que otros veranos y he cobrado lo mismo o menos que otros veranos, por lo tanto la palabra fijo solo me sirve para fardar con los amiguetes en los ratos de bar.

Desde otro lugar, a otra hora distinta, se despide su cartero favorito (o no). Turchu :)